Si bien las hadas son seres del aire, reales y naturales, la imaginación humana tiene la necesidad de introducir algo de esa belleza etérea en su cotidianidad. Por eso ahora pongo no tanto un largo post con cantidades de información sobre ellas, sino obras que introducen a estas maravillosas criaturas en nuestras crecientes urbes y las subculturas que las pueblan.
El hada pinup: sensualidad, sexualidad y un espíritu juguetón, que nace en los años cuarenta, hasta los cincuenta... y detrás de esta estética se agolpan la Segunda Guerra Mundial y la Guerra Fría.
Urban fairy: No es la mejor ilustración, pero sí es única. Un hada vanidosa, que nos refleja a nosotros mismos en su admiración narcisista.